Cómo guardar tu Mazda CX-3 durante largos períodos

Preparativos para el almacenamiento del Mazda CX-3
Antes de guardar tu Mazda CX-3, es crucial considerar medidas para preservar su estado mecánico y estético.
Mantenimiento de la batería durante el almacenamiento
Una batería bien cuidada asegurará que tu Mazda CX-3 esté listo para arrancar cuando lo necesites.
Protección de los neumáticos
Infla los neumáticos de tu Mazda CX-3 a una presión mayor antes de almacenarlo para evitar deformaciones.
Conservación del combustible
Es recomendable usar un estabilizador de combustible en tu Mazda CX-3 si no lo vas a usar por un tiempo prolongado.
Mantenimiento general del vehículo
Es aconsejable cambiar el aceite y los filtros antes de almacenar tu Mazda CX-3 para prevenir la corrosión interna.
Conclusión sobre la importancia del almacenamiento adecuado
Un Mazda CX-3 bien almacenado estará listo para funcionar a su máximo potencial cuando decidas volver a ponerlo en marcha.
